viernes, 28 de febrero de 2014

Tensión en las alturas


Non Stop  





Que Liam Neeson es un actorazo, nadie puede dudarlo. Actor rendidor si los hay, sus papeles son garantías de un personaje bien interpretado; pero desde hace unos años le dio un giro a su carrera que nos gustó a todos: ahora a sus sesenta años se le anima a las pelis de acción. Pese a que en el medio se coló alguna caca, sus pelis de acción como mínimo son entretenidas, con lo que ya por eso vale la pena verlas. Como la peli de hoy.

Bill Marks es un agente a bordo; lo que parece un vuelo más del montón en el que fumara y tomara a escondidas, se transforma en un secuestro por parte de un anónimo. Bill no solo tendrá que adivinar y atrapar al secuestrador, si no que deberá limpiar su imagen, ya que todas las pruebas apuntan a que es el mismo quien secuestro el avión.

Lo primero que tengo que decir, es que pese a que hable de este film como una película de acción, no lo es. Si, tiene sus escenitas movidas, pero es más un policial o thriller que una de tiros. Básicamente, estamos ante el típico caso que el tráiler nos enchufo algo que no es.

Aclarado esto, vale decir que Liam Neeson sigue en lo que nos tiene acostumbrados. Es decir, buena actuación, imponiendo presencia y haciendo un personaje creíble (y bancándose unos primeros planos bastante asesinos).

A su impronta personal, también se encargaron de agregarle unos matices a su personaje para distanciarlo un poco del  Brian Mills de la saga Taken (aunque el nombre es parecido). Nuevamente se hace presente el tema de la familia, además que utilizan el recurso del alcoholismo, que siempre funciona para volver más turbio a los personajes.

De todas formas lo que más destaca del film es la historia en sí. El trio de guionistas supo aprovechar tanto la claustrofobia natural que genera un avión, con el uso de la tecnología y su pese a priori seguridad, lo falible que es. De la propia sinopsis se desprende que estamos ante la clásica película del juego del gato y el ratón, pero en un avión y con sms de por medio.

Quizás a muchos les parecerá que el film se enrosca demasiado, ya que básicamente la mitad de los pasajeros resulta sospechosos. Tranquilo espectador querido, milagrosamente los guionistas salen bien parados del asunto. El final es lógico, todo encaja, y no es necesario el típico clip recopilatorio al estilo Saw que trata de mongo al público.

Además hay que aplaudirlos por saber que la historia no daba para mucho más. En la época donde las películas parece que obligadamente deben durar más de dos horas; que los guionistas entiendan que lo mejor era contar algo efectivo, concreto y corto, ya también es un mérito en sí.

Ojo, no estoy hablando de una película perfecta. Pero para lo que apunta y lo que da, el resultado es bastante redondo.

Si se extraña una dirección un poco menos genérica, con algún plano arriesgado, y no tan convencional, como si la hubiera filmado cualquiera de nosotros. O la manía de los guionistas de buscar la lagrimita fácil, metiendo una sub trama con una niña que no aporta nada, y es bastante insoportable. Aunque viendo el historial del director, no debería sorprendernos como a veces desperdicia buenas historias.

Mención aparte para Julian Moore, que si bien no aporta demasiado, a sus cincuenta y tres años aún está bastante buena.

Non Stop: Sin Escalas es una efectiva peli de suspenso con toques de acción. No ofrece demasiado, pero cumple con esa premisa básica del cine que es entretener y no insultar al espectador pretendiendo ser más de lo que es.



Un saludo viajando en barco.



Nota: 7



Jorge Marchisio
Mi face  Yorsh A. Romero
 

martes, 25 de febrero de 2014

El letargo de la tercera edad


Nebraska




Sinceramente esta era una de las películas nominadas al Oscar que tenía nula ganas de ver. El reparto sin ninguna cara conocida, que esta filmada en blanco y negro me daba la sensación a peli típica de las que pasaban en Hallmark. Eso sumado a que varias de las que ya vi me parecen peliculones, estaba mal predispuesto cuando puse el dvd. Error.

Woody es un anciano típico del pueblo de Billings. Luego de ser encontrado caminando solo por la policía, Woody dice que se dirigía a Lincoln, Nebraska en búsqueda de un premio millonario que gano. Su hijo menor, lejos de hacerle caso a su madre y hermano mayor, decide llevar a su padre en búsqueda del premio que sabe que no existe, mientras en el camino van parando en pueblos para visitar a su familia.

Mientras arrancaba la peli, mire en imdb, que para mi sorpresa el director es Alexander Payne, realizador de films como Los Descendientes o Entre Copas; lo cual significa pelis entre cómicas y dramáticas, mostrando gente normal en situaciones normales, donde ese roza constantemente el patetismo.

Y eso es lo que nos ofrece Nebraska. A muchos el concepto de una road movie plagada de actores que pasaron hace tiempo los sesenta años les puede sonar a bodrio, pero nada más lejos de la realidad. No solo porque la película es entretenida, sino que además tiene más de una lectura.

La más obvia es ver la miseria de la gente cuando se entera que alguien frágil y débil puede ser cagado. El tema del premio millonario (que siempre queda en claro que es una mentira que decidió creer Woody) nos muestra como la gente al ver algún billete, se caga en viejas amistades, lazos de sangre o afectivos. 

Es interesante también lo que representa el pueblo donde transcurre un gran tramo de la película, y que es donde creció Woody. Ahí vemos a casi toda su familia, ya anciana, y a sus amigos, también vejetes. No es gratuita la visita a un cementerio vacío en el transcurso de toda la parte del pueblo. Y es que los cadáveres vivientes son los propios amigos y parientes de Woody. Gente que se quedó a vegetar en un lugar sin futuro, estancado en el tiempo, sin proyectos, dejando que la vida pase por ellos.

Contrariamente a lo que parece, el propio Woody es el personaje más vivaracho de la peli. Pese a que se nos dice que padece (y padeció) de alcoholismo y esta senil, Bob Nelson (guionista) y Payne se encargan de dejarnos en claro que el anciano es mucho más lúcido de lo que en realidad aparenta. Y para mejor ejemplo miren el final.

El ya machacado Bruce Dern se luce como el viejo Woody. La forma de caminar, de hablar, de comportarse como si estuviera ido de a ratos, nos hace creer que de verdad estamos viendo a un viejo senil que ya está en las ultimas. El resto del elenco está a la altura, pero destaca el siempre efectivo Stacy Keach, haciendo como siempre de hdp.

La decisión de Payne de filmar íntegramente toda la peli en blanco y negro, sinceramente al principio se me hacía caprichosa y media al pedo. Luego de ver la película, tuve que cerrar el ass y darle la razón. Toda la frialdad que transmite filmar en blanco y negro le saca más provecho a una historia sobre gente gris, en vidas grises monótonas vegetando.

Nebraska es casi lo opuesto a El Discurso Del Rey (film oscarizado que también parecía made in Hallmark). Y es que ambas, tanto por reparto, historia y director, bien podrían ser pelis para un domingo a la tarde noche para dejar en la tv mientras uno hace otra cosa. La diferencia es que en Nebraska, estas aparentes limitaciones son a propósito y se les saca el mayor provecho posible.

Seguramente no sea una película que le guste a mucha gente. Primero por el rechazo a films sin color en plena época del 3D, además de la historia en apariencia simple, sin estrellas. Si uno deja de lado estos prejuicios, y la mira con la mente abierta, seguro se llevara una gran sorpresa. Como me paso a mí.


Un saludo riéndome de los demás sin que lo sepan.



Nota: 8


Jorge Marchisio
Mi face Yorsh A. Romero